Manipulación social
Vivimos bajo la presión de los estándares sociales que trabajan como poderosos manipuladores en favor de intereses de una minoría.
Somos conducidos a sentirnos pecadores, a tener dolor, sufrimiento, falta de abundancia, enfermedades, como si no fuésemos merecedores de algo mejor.
Somos conducidos a desarrollar características físicas y actitudes consideradas aceptadas por la sociedad.
Acabamos por vivir lo que no somos, viviendo lo que la sociedad nos determina.
Aplastados por la sociedad e invadidos por el miedo, nos dejamos envolver por la ilusión de que no somos, y comenzamos a hacer parte del juego del poder. Precisamos vivir y realizar los mandamientos sociales para ser aceptados.
Nos olvidamos de la naturalidad y la espontaneidad.
Nos dejamos llevar y somos conniventes.
Nos sometemos al poder de manipulación de una minoría por miedo y comodidad.
Nos tornamos Seres Humanos poseídos por la ilusión, porque representamos para la sociedad lo que no somos. Lo que no es natural acaba trayendo desequilibrio, y consecuentemente nos desviamos de nuestro plan de vida y nos alejamos de nuestra Alma.
Nuestro objetivo pasa a ser: tener una posición social favorable, ganar dinero para comprar cosas que la sociedad valoriza. Vivimos en constante comparación con otros humanos, todo eso por la ilusión de ser aceptados y bien vistos por la sociedad.
¿Y por qué elegimos eso?
Porque vivimos en la onda de la mayoría. No somos conscientes, no valorizamos nuestra propia personalidad, nuestra individualidad; vivimos como perfectos robots. No reflexionamos, no pensamos y actuamos por impulso con base en ilusiones, porque aceptamos reglas y creencias impuestas por la sociedad que nos atemorizan sin reflexionar.
¿Qué tal rescatar su propia personalidad?
Un abrazo,
Marta Ceul